Aunque parezca un imposible el BCRA está importando hace ya varios meses billetes de alta denominación desde Brasil. Básicamente esto se debe a que las plantas productoras de Retiro y Don Torcuato no pueden atender la demanda de emisión que el Gobierno Nacional está llevando adelante a partir del inicio de la cuarentena y que sostuvo desde que la pandemia de COVID-19 llegó a la Argentina.

Las restricciones internacionales, la caída del comercio y del consumo y el parate total de la economía y de la industria significaron una caída estrepitosa para las arcas del Estado, pero a contra mano, el Gobierno aumentó el gasto y la inversión notoriamente. El IFE y el ATP fueron quizás las dos políticas que más dinero inyectaron desde las arcas nacionales.

Desde el ejecutivo dijeron que "se registran dos picos históricos de demanda de billete, en julio y diciembre". Y que se buscará de esta manera abastecer la demanda.

La mayor cantidad de papel moneda llega y seguirá llegando desde Brasil, hasta al menos marzo de 2021, y en una menor cantidad será la Casa de la Moneda y Timbre de Madrid la que enviará billetes de mil pesos.