Por: Agustina Miranda

La visita a genocidas en el penal de Ezeiza por parte de un grupo de libertarios ocasionó el quiebre total en la Cámara de Diputados de la Nación, donde la mendocina Lourdes Arrieta propuso investigar esta reunión -cómo se originó y por qué- y desde el bloque decidieron quitarle la banca.

 

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Para anticiparse a su apartamiento, el martes a la tarde Arrieta decidió renunciar al espacio y proponer su monobloque Fuerzas del Cielo - Espacio Liberal: "Como parte del oficialismo, seguiré defendiendo mis valores judeocristianos y liberales, acompañando al presidente de la Nación, Lic. Javier Gerardo Milei, desde mi labor como legisladora", expresa la nota formal a las autoridades legislativas.

Fuente: Infobae

Asimismo, la diputada aseguró que no quiere formar parte de un espacio que "no respeta" su agenda ni la del presidente, sumado al "tema delicado" de la visita a represores, del cual no "quiere formar parte".

 

Este miércoles, Arrieta dijo en diálogo con Urbana Play: "Me iban a echar por decir la verdad, por haber denunciado, por haberle prestado atención a lo que sucedía en los chats. La visita a Ezeiza fue una cama, lo que me hicieron, escracharme y después lavarse las manos. Querían que yo me comiera el repudio en la Cámara".

 

"Me echaron como un perro", sumó y se defendió sobre su participación en la visita: "Sabía que era una visita institucional, humanitaria, para conocer las condiciones edilicias y sanitarias de los internos, no se me había informado".

 

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— Lourdes M Arrieta (@lulumicart) August 27, 2024