

Creada por los guionistas Álex Pina y Esther Martínez Lobato, los mismos de La Casa de Papel, Sky Rojo, la nueva serie de Netflix se ubica en el puesto uno de los más vistos de esta semana. Una primera temporada de 8 capítulos de una duración de entre 20 y 30 minutos cada uno, que deja el final abierto para una segunda temporada. Serie para mirar de un tirón.
¿Por qué la serie tiene tanto éxito en Argentina?
1.En primer lugar, porque las series españolas son muy bien recibidas en nuestro país, y en segundo lugar porque una de las protagonistas principales es la actriz y cantante argentina Lali Espósito, quien el año pasado se llevó el premio Billboard Latinos a la mejor artista en redes sociales, dato no menor a la hora de elegir el elenco.
2.También, en la serie se pueden encontrar algunos guiños que hacen referencia a nuestro país, uno de ellos es principalmente la historia de Wendy (Lali Espósito) #SpoilerAlert. Nacida en el Barrio 31 (villa 31) de la Ciudad de Buenos Aires, debe dejar a su novia y migrar a España en busca de un mejor futuro económico. Allí termina trabajando en un prostíbulo junto a otras mujeres, rehenes de sus empleadores.
3.Una serie que también se destaca por su música, se puede destacar la incorporación de dos canciones de artistas argentinos, la primera, al comienzo, donde se observa a las protagonistas en la terraza del prostíbulo, una introducción en voz en off, sello característico de la productora Vancouver Media y de fondo sonando “Tal Vez” del cordobés Paulo Londra. En segundo lugar, una escena donde las protagonistas tienen una parada técnica en un lavadero de autos y bailan al compás de “Se quema” de Miss Bolivia.
Debate y polémica entre las feministas
1.Trabajo sexual vs prostitución o abolicionistas vs reglamentistas. El debate se centra en uno de los temas más discutidos por el feminismo que no logra llegar a acuerdos.
Existe una postura muy fuerte de aquellas organizaciones y trabajadoras sexuales que luchan por ser reconocidas dentro de la legislación laboral, tanto en Argentina como en España, la postura es que la oferta y la demanda sexual es similar a cualquier otro trabajo de otro rubro, y que por lo tanto no tiene que haber un prejuicio moral sobre eso.
Desde estas organizaciones exigen a las productoras de cine y televisión que no comparen el trabajo sexual con la trata de personas, señalando que siempre se las representa como víctimas o como aquellas que el cliente debe salvar, así lo expresaba en su cuenta de instagram, la trabajadora sexual callejera, Georgina Orellano cuando haciendo alusión al estreno de la serie decia “la vida de las prostitutas relatadas a través de cuerpos hegemónicos que buscan salvarse y cambiar de vida...todos los finales felices construyen la idea que salir de la prostituciñon es nuestra única salvación”.
Por otro lado, la postura de las organizaciones que se consideran abolicionistas del trabajo sexual, utilizan este termino para señalar la explotación humana en dicha situación.
Es decir, que aquellas que no quieren regulaciones para este tipo de tareas, consideran que en estas circunstancias, a las personas se las somete y que la “libre elección” no es totalmente consentida sino que el contexto social, económico y la situación de vulnerabilidad hacen que sea la única opción para muchas mujeres y trans.
Este último posicionamiento, es el que adopta la trama de la serie, ya que recrea la vida de tres mujeres que por diversas dificultades sociales y/o económicas deciden prostituirse pero que luego de serios problemas que deben enfrentar dentro del prostíbulo se unen para poder salir y escapar de esa situación
2.Romantización y banalización de la prostitución. Asimismo, la serie también introdujo otro debate. Se acusa a los realizadores de banalizar y romantizar la prostitución y que en la “vida real” lo que se muestra y reconstruye Sky Rojo está muy alejado del sufrimiento y de las condiciones de precariedada en la que trabajan las prostitutas. Incluso, una de las mayores críticas es que abundan las escenas de erotismo que se llevan a cabo en varios de los capítulos, también fue motivo de crítica el vestuario elegido siendo muy tendencioso como también la representación de los cuerpos de las mujeres, esbeltos y perfectos.
Más allá de las críticas y las polémicas que generó Sky Rojo, lo que se debe saber es que la serie no es un documental, es una ficción, por lo tanto puede tomarse algunas licencias a la hora de crear. Aunque una vez que la producción está en manos del público, sus interpretaciones, críticas y/o elogios están fuera de su control.