

El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, afirmó hoy que la provincia de Buenos Aires "adhiere a las medidas que dictó el Presidente" Alberto Fernández para combatir el coronavirus y destacó que cuando se pide "coordinar" acciones con la Ciudad de Buenos Aires es porque "el virus no reconoce un lado u otro de la General Paz".
"Si se deja hacer cualquier cosa de un lado de la General Paz y del lado de la Provincia se restringe, eso no funciona; por eso es necesario coordinarlo. El virus no reconoce un lado y otro de la General Paz", expresó Kicillof en conferencia de prensa en La Plata.
"Estamos inmersos en una ola" de coronavirus que "sigue creciendo desenfrenadamente" y remarcó que ante esa situación "no puede ser que el virus vaya por ascensor y las medidas por LA escalera".
"El 29 de marzo, hace 15 días, el récord había sido 14 mil casos y el 6 de abril eran 21 mil, todo en una semana", detalló Kicillof.
"Hoy en la ciudad de Buenos Aires estalló el sistema privado de salud" y que la provincia de Buenos Aires está atendiendo pacientes derivados de la Capital Federal.
"Se acabaron las camas del sistema privado, que atiende al 80% de la población de la Ciudad de Buenos Aires; pero cuando el jefe de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta, habla de camas, sólo habla del sistema público", expresó Kicillof, quien aclaró que la provincia "no va a rechazar a ningún paciente derivado".
Kicillof dijo que a nadie les gustan las medidas restrictivas adoptadas por el coronavirus, pero advirtió que "lo que no nos gusta es que esté lleno de contagios y de muertos".
"¿Qué estamos discutiendo? ¿Si cuando llueve abrimos el paraguas o no? Anunciamos estas medidas por tiempo limitado. A nadie gusta pero lo que no nos gusta es que esté lleno de contagios y muertos. Es oportunismo, es vil cargar las tintas y exacerbar odios", remarcó.
Además explicó que la suspensión de las clases presenciales por 15 días en el AMBA no se dispuso solo "por lo que pasa adentro de las escuelas", sino que también "es la circulación, lo que pasa antes y después".
"Se trata de bajar la circulación, y por 15 días, porque hay una proporcionalidad entre circulación y contagios", afirmó.