Por: Samuel Begue

El paso de Norberto Briasco en Gimnasia pasará a la historia como una fiasco. En su momento, Boca dio mil vueltas para cederlos al Lobo e incluso le puso cláusulas de repesca y hasta la posibilidad de igualar ofertas en caso de recibir una ostentosa por el atacante. Además, fue Gimnasia quien se tuvo que hacer cargo de su contrato, el cual es de los mejores del plantel. Sin embargo, su paso fue, repito, un fiasco.

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Vale recordar, que Boca le pagó a Huracán (donde tuvo su mejor momento futbolístico) un monto cercano a los 3,5 millones de dólares por el hombre de la selección armenia, por lo cuál las expectativas que recayeron sobre el Beto en su llegada al Lobo en búsqueda de continuidad y una posible recuperación futbolística fueron muy altas.

Sin embargo, rápidamente se cayó todo el cuento y llegó la desilución, el nivel de Briasco con la camiseta de Gimnasia fue muy malo y aseguran que su relaciones con sus compañeros, y hasta con los empleados del club, se fu deteriorando progresivamente.

Sus reiteradas lesiones y pedidos de atención médica durante la semana llevaron al fastidio del cuerpo técnico que en ese entonces conducía Marcelo Méndez y hasta se pensó en devolverlo a Boca por parte de la Comisión Directiva. Si bien eso no sucedió -por ahora-, hubo varios los informes que le llegaron al Consejo del Fútbol sobre el poco compromiso del jugador con la institución y lo ajeno que está al día a día del plantel, además del fastidio de los trabajadores del club.

Briasco se habría comprometido a quedarse en el Lobo y rever sus formas y su compromiso. Sin embargo, luego de la derrota ante Independiente, ya bajo el interinato de Fernando Zaniratto, generó más bronca en el delantero que manifestó nuevamente su desconceto. Por lo que, según aseguró el periodista partidario Ignacio Tara, Gimnasia quiere forzar ua salida del atacante para cortar el problema de raíz y generar calma en el plantel. Aunque parece una tarea compleja ya que el libro de pases se encuentra cerrado.

Desde su llegada a Gimnasia en agosto del año pasado, Briasco jugó apenas 667 minutos en 11 partidos, de los cuales en ocho fue titular, y convirtió un gol. La mayor parte de su ciclo estuvo relegado por tratamientos médicos o en el banco de suplentes. Cansó por completo al cuerpo técnico de Méndez y en un partido cargó de bronca al de Zaniratto. Ahora, el Norby fiasco ni siquiera figura en la lista de concentrados para el encuentro de este miércoles, también por Copa Argentina, contra Deportivo Español.