Por: Samuel Begue

Vélez fue uno de los mejores equipos del fútbol argentino en 2024 y su premio fue la consagración en la Liga Profesional (más allá de que perdió tres finales). Sin embargo, en el arranque del 2025 la historia parece ser distinta, si bien se le fueron piezas claves como Claudio Aquino, Valentín Gómez y su entrenador Gustavo Quinteros, nadie esperaba un comienzo así. El Fortín es el peor equipo del Torneo Apertura, apenas suma un punto y no convirtió goles en las primeras seis fechas. Se trata del peor arranque de un campeón en la historia del fútbol argentino.

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Este lunes cayó por 2 a 0 ante Godoy Cruz, un resultado que refleja el momento que atraviesa el conjunto de Liniers. El plantel, que no cambió tanto en nombres, aún no logra interpretar la idea del maestro Sebastián Domínguez y tampoco representa a los hinchas, quienes tenían altas expectativas de cara a este 2025 donde tendrán que disputar, entre otras cosas, la Copa Libertadores.

Pese a este pésimo arranque, Domínguez demostró que mantiene la fortaleza necesaria para seguir siendo el entrenador. "Estoy con fuerzas, vine a trabajar un tiempo largo. Los procesos se sustentan desde el trabajo, me reuní hoy con la comisión directiva en el vestuario, vinieron a decirme si estaba convencido y no tenían dudas de que el camino es el del partido de hoy", aseguró el ex panelista de ESPN.

Además, demostró su gratitud al público: "Con el hincha estamos agradecidos, en una racha muy negativa hoy alentó hasta el final y apoyó hasta el último minuto con todo lo que esto conlleva, lo difícil que es que la gente apoye y siga creyendo en el plantel más allá de los resultados, fue emocionante más allá del resultado final. El hincha en vez de elegir el lado más fácil que es el insulto o el reclamo, terminó cantando como si peleáramos el campeonato. Cuando el hincha se muestra incondicional, la responsabilidad es doble. Cuando te sentís resistido, es mucho más fácil soltar".

Lo cierto es que los números no hacen más que demostrar que este flojísimo inicio de torneo que pasará a la historia como el peor del fútbol argentino. Es el vigente campeón que menos puntos sacó en las primeras seis jornadas del campeonato siguiente. Tan solo San Lorenzo en el Metropolitano de 1975 y Newell's en el Apertura de 1992 pasaron más partidos sin ganar (7) en el arranque del torneo posterior al que fueron campeones. La diferencia es que tanto el Ciclón como la Lepra sumaron más puntos producto de haber cosechado algunos empates.

Por otra parte, es la primera vez en la historia que un vigente campeón no anota goles en las primeras seis jornadas del certamen siguiente a la consagración.