Según indica el documento el Gobierno del Reino Unido de Gran Bretaña realizó nuevas maniobras militares el lunes y el miércoles pasado.

La medida constó de pruebas con misiles Rapier en el territorio invadido por la corona británica, y fue denunciado por el Gobierno argentino ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y ante la Organización Marítima Internacional (OMI).

Según dicta el comunicado publicado en redes sociales por el Ministerio Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto conducido por Felipe Solá, Argentina “emitió el correspondiente aviso náutico con la debida salvaguarda de los derechos de soberanía argentinos, a efectos de que el tráfico marítimo en la zona de los ejercicios militares no sea puesto en peligro por los ilegítimos ejercicios militares británicos.”

Esta denuncia se da en un contexto de discusión en el ámbito nacional sobre la cuestión Malvinas después de que la presidenta del PRO, Patricia Bullrich, haya declarado en una entrevista que “le podríamos haber dado las Malvinas a Pfizer”, mientras reclamaba un acuerdo urgente por vacunas con el laboratorio estadunidense.

Al respecto el Secretario de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur, Daniel Filmus dijo que Bullrich “desconoce la Constitución, le falta el respeto a quienes dieron su vida por defender las Malvinas y a las y los argentinos”.

Frente al despliegue militar de la potencia en territorio malvinero, la Cancillería destacó que  “las Fuerzas Británicas en las Islas del Atlántico Sur (BFSAI) resultan desproporcionadas si se tiene en cuenta la persistente voluntad de diálogo expresada por el Gobierno argentino y su deseo de resolver la disputa territorial por medios pacíficos” y agregó que  “Frente a este nuevo acto de hostilidad, la República Argentina sigue reafirmando su permanente y constante voluntad de negociación entre las dos partes involucradas en la disputa de soberanía”.

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