

El intendente de La Plata, Julio Alak, y el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, participaron este sábado del tradicional Tedeum con motivo del 25 de Mayo. La ceremonia litúrgica se llevó a cabo en la Catedral de la Inmaculada Concepción, ubicada en calle 14 entre 51 y 53, y estuvo presidida por el arzobispo Gustavo Carrara.
El acto contó con la presencia de ministros, legisladores, concejales, funcionarios municipales y autoridades de distintos municipios de la región capital, además de vecinos que se acercaron a conmemorar un nuevo aniversario de la Revolución de Mayo. “Hoy conmemoramos un nuevo aniversario de la Revolución de Mayo, un momento clave en nuestra historia que nos enseñó el valor de la unidad y la lucha por la libertad. Como intendente, me siento orgulloso de seguir trabajando por una ciudad más justa y equitativa, inspirada en los ideales de nuestros próceres”, expresó Alak.
Kicillof, por su parte, destacó el mensaje del arzobispo Carrara: “Celebramos el mensaje del Arzobispo Gustavo Carrara sobre la necesidad de que los sistemas económicos pongan en el centro a la solidaridad y el bien común y de la importancia de acompañar a nuestro pueblo, empezando por quienes más lo necesitan”.
Durante su homilía, Carrara hizo un llamado a los dirigentes: “Damos gracias a Dios Creador por habernos regalado la patria que habitamos. Y este año lo hacemos en el Jubileo de la Esperanza”. En esa línea, añadió: “Todos los que detentamos algún tipo de poder, tenemos que ponernos al servicio del bien común, especialmente de aquellos que están más heridos en su dignidad, y hacerlo al modo de Jesús que se bajó para lavarnos los pies”. El arzobispo concluyó: “Servir es fundamentalmente cuidar con ternura, y defender con firmeza, la fragilidad de nuestro pueblo… seguir organizando la esperanza”.