

Tras varios días de lluvias persistentes, La Plata y el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), comenzaron a sentir el ingreso de una masa de aire frío que marcó un giro abrupto en el clima. Aunque se habló de una “bomba polar”, el fenómeno no fue tan extremo como se anticipaba, pero igualmente trajo temperaturas invernales y fuertes ráfagas.
Desde este miércoles 28 de mayo, el descenso térmico se hizo evidente: las mínimas en la región rondaron los 5 °C y las máximas no superaron los 13 °C. La tendencia continuará en los próximos días, con cielo mayormente nublado, sensación térmica baja por efecto del viento sur, y mañanas marcadas por el frío. En algunas zonas del interior bonaerense ya se registraron heladas y marcas cercanas a cero.
El Servicio Meteorológico Nacional emitió alertas por frío extremo en otras regiones del país, donde se esperan temperaturas bajo cero y nevadas intensas. Pero no es el caso del AMBA.
En La Plata, el jueves se mantendrá con temperaturas similares (mínima de 5 °C y máxima de 12 °C), mientras que el fin de semana llegará con una mejora progresiva: volverá el sol, pero las mínimas seguirán por debajo de los 8 °C, en un anticipo claro del invierno meteorológico que comienza el 1º de junio.
Así, con o sin etiqueta de “bomba polar”, el frío llegó y se quedará por varios días. La temporada de camperas, bufandas y guantes ya empezó en las calles platenses.