Por: Bautista Catalano

Auckland City representa una rareza en el fútbol mundial. Con una base de jugadores semiprofesionales que trabajan en oficinas, ferreterías o gimnasios, el equipo neozelandés vuelve a decir presente en el Mundial de Clubes. Y lo hace con historia, identidad y un palmarés que lo convierte en el gigante de Oceanía.

Orígenes e identidad

Fundado en 2004 en la ciudad de Auckland, el club -conocido como los Navy Blues- representa un caso atípico en el fútbol moderno: un equipo semiprofesional que compite contra gigantes mundiales.

Palmarés y hazañas

Auckland City ha ganado 10 veces la OFC Champions League, incluyendo una racha histórica de siete títulos consecutivos entre 2011 y 2017. Esa supremacía regional le permitió disputar diez ediciones del Mundial de Clubes. Su punto más alto fue en 2014, cuando terminó tercero: cayó ante San Lorenzo en semifinales y venció por penales al Cruz Azul en el partido por el podio. Es la mejor actuación de un club semiprofesional en el torneo.

¿Quién es su goleador histórico?

Emiliano Tade, argentino, es el máximo anotador en la historia del club con 138 goles en 211 partidos. Formado en Mitre (Santiago del Estero), también jugó en Team Wellington y en el Mamelodi Sundowns de Sudáfrica. Llegó a Nueva Zelanda con 22 años y construyó su carrera con los Navy Blues.

¿Qué hacen sus jugadores fuera de la cancha?

La mayoría de los futbolistas de Auckland City compaginan el fútbol con otros trabajos. Angus Kilkolly, uno de los goleadores del equipo, es gerente de ventas en una empresa de herramientas eléctricas. “Llego a la oficina a las 7:30, trabajo, entreno 3 o 4 veces por semana, llego a casa a las 21 y me acuesto”, contó. Para disputar el torneo, solicitó licencia sin goce de sueldo.

Otros ejemplos: el arquero Conor Tracy trabaja en una ferretería; los defensores Nikko Boxall y Adam Mitchell son productor de seguros y agente inmobiliario, respectivamente; Michael Den Heijer es entrenador personal; y Gérard Garriga es director técnico de divisiones infantiles.

¿Por qué es un club semiprofesional?

En la liga neozelandesa, el salario promedio apenas supera los 90 dólares semanales. Por eso, muchos jugadores estudian o trabajan en otras áreas. Aun con esa realidad, Auckland City logró sostener un dominio regional y una presencia casi constante en el Mundial de Clubes, donde enfrenta a clubes con presupuestos e infraestructuras profesionales.

El presente en el Mundial

En esta edición del torneo, Auckland City debutó con una dura derrota 10-0 ante el Bayern Múnich. Ahora buscarán una mejor imagen ante el Benfica de Ángel Di María, el viernes 20 de junio, en Orlando. Cerrarán su participación en el Grupo C frente a Boca Juniors, en un cierre que promete ser tan exigente como histórico.