

En medio de la creciente escalada bélica en Medio Oriente, el Papa León XIV lanzó un apremiante llamado a la comunidad internacional para que ponga fin a la violencia en la región. Lo hizo tras el rezo mariano del Ángelus, desde la Plaza de San Pedro, donde advirtió que el sufrimiento de la población civil -especialmente en Gaza- corre el riesgo de ser olvidado entre bombardeos y amenazas nucleares.
“Hoy más que nunca, la humanidad clama e invoca la paz. Es un grito que exige responsabilidad y razón, y no debe ser sofocado por el estruendo de las armas ni por palabras retóricas que incitan al conflicto”, expresó el Papa, en un mensaje en el que también reclamó ayuda humanitaria urgente para las zonas afectadas.
La advertencia de León XIV llega luego de que Estados Unidos atacara tres instalaciones nucleares en Irán -Fordó, Natanz e Isfahán-, en respuesta a la guerra entre Teherán e Israel. El presidente Donald Trump advirtió que habrá nuevas ofensivas si Irán no opta por la paz. Mientras tanto, los ataques israelíes sobre la Franja de Gaza ya provocaron más de 200 muertos y un millar de heridos solo en las últimas 48 horas, agravando una crisis humanitaria que lleva más de 20 meses.
“No existen conflictos lejanos cuando la dignidad humana está en juego”, recordó el Papa, que condenó de forma tajante la idea de que la guerra pueda ser una solución: “La guerra no resuelve los problemas, los agrava. Ninguna victoria armada podrá compensar el dolor de las madres, el miedo de los niños, el futuro robado”.
Por último, León XIV instó a la comunidad internacional a actuar: “¡Que la diplomacia haga callar las armas! ¡Que las naciones tracen su futuro con obras de paz, y no con violencia y conflictos sangrientos!”.