

Green House, una reconocida dietética platense con tres sucursales y ocho años de trayectoria, sufrió el hackeo de su cuenta de Instagram y hoy enfrenta una crisis en su vínculo con los clientes. La empresa perdió su perfil principal, que tenía 38.000 seguidores y funcionaba como canal central de comunicación, ventas y difusión de promociones.
La cuenta, conocida como “Comunidad Green House”, fue intervenida hace un mes. Un virus comenzó a enviar mensajes automáticos en inglés, instando a los contactos a seguir un perfil de contenido erótico. A raíz de esa actividad irregular, Instagram suspendió la cuenta. Desde entonces, la firma inició los trámites para intentar recuperarla, pero todavía no lograron hacerlo.
En paralelo, Green House abrió un nuevo perfil en Instagram: @greenhouse.comunidad, para seguir informando a sus seguidores sobre horarios, ofertas y novedades de sus tres sucursales: la original en 51 y 16, la segunda en 7 y 39, y la última, frente a Plaza San Martín, en diagonal 79 y 54.
Green House no es una dietética tradicional. Su propuesta busca que cada visita sea un paseo, con un formato tipo minimercado que invita a recorrer góndolas y elegir entre una amplia variedad de productos saludables.
A pesar del golpe digital, el emprendimiento sigue en pie y redobla esfuerzos para reconstruir el vínculo con su comunidad online.