Independiente quedó eliminado de la Copa Sudamericana. En la previa del partido de la Selección Argentina por las Eliminatorias Sudamericanas, CONMEBOL decidió descalificar al Rojo tras los episodios de violencia del pasado 20 de agosto en el duelo ante la Universidad de Chile en el Estadio Libertadores de América. El conjunto chileno avanza a cuartos de final.

El escándalo comenzó cuando un pésimo operativo de seguridad permitió que los 4 mil hinchas de la Universidad de Chile se ubicaran en la tribuna Pavoni Alta, sin rejas ni redes, mientras que no se desplegó personal suficiente para contener la violencia. Durante el partido, se registraron agresiones mutuas: hinchas chilenos atacaron a los simpatizantes de Independiente, y minutos después la barra del Rojo ingresó a la tribuna alta para golpear a los visitantes, obligándolos incluso a despojarse de parte de su ropa. Entre los incidentes más graves, un aficionado chileno se arrojó desde lo alto de la tribuna y sobrevivió de milagro al caer sobre un techo.

Tras la suspensión del encuentro, ambas dirigencias realizaron descargos ante la Conmebol en la sede de Luque, Paraguay. Sin embargo, tras evaluar los hechos, el organismo determinó que Independiente debía ser eliminado del certamen, mientras que Universidad de Chile avanzará, aunque sin público visitante en el próximo partido ante Alianza Lima.

En paralelo, la Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte (Aprevide) tomó medidas de seguridad adicionales: prohibió el ingreso de público visitante a los partidos que Universidad de Chile dispute en la provincia de Buenos Aires hasta el 31 de diciembre de 2027, y restringió la concurrencia a espectáculos deportivos a 41 integrantes de la barra de Independiente involucrados en los hechos.

El presidente de Independiente, Néstor Grindetti, aseguró tras la audiencia: “Estamos tranquilos. Expusimos nuestros argumentos de forma clara y concisa”. Por su parte, Michael Clark, titular de Azul Azul, gerenciadora de Universidad de Chile, destacó: “Yo me voy contento. Pudimos reiterar nuestra verdad y los abogados estuvieron muy bien”.

El Reglamento Disciplinario de la Conmebol contempla para situaciones como esta sanciones que van desde multas económicas y advertencias, hasta la descalificación de competiciones y la prohibición de vender entradas. En este caso, el organismo aplicó la medida más drástica: la eliminación de Independiente de la Copa Sudamericana.

El 20 de agosto quedará marcado en la memoria del fútbol sudamericano como otra jornada oscura, en la que la violencia de los barras impidió disfrutar de un verdadero espectáculo deportivo.