El entrenador de Boca, Miguel Ángel Russo, se ausentó del entrenamiento de este miércoles en Boca Predio debido a chequeos médicos programados. El DT, de 69 años, quedó internado en una clínica porteña donde pasará la noche en observación, tal como estaba estipulado por sus médicos tras el cuadro de deshidratación que sufrió el lunes pasado.

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En esa oportunidad, Russo había tenido que recibir suero tras el partido ante Central Córdoba en La Bombonera, pero rápidamente recibió el alta y continuó con sus tareas. A comienzos de septiembre también había estado internado durante cinco días en el Sanatorio Fleni por una infección urinaria.

Mientras tanto, Claudio Úbeda, su principal colaborador, quedó al frente de la práctica de Boca. El plantel se prepara para visitar a Defensa y Justicia este sábado en Florencio Varela, por la décima fecha del Torneo Clausura. Desde el club aclararon que no existe preocupación respecto de la continuidad de Russo, y remarcaron que lo más importante es que el DT pueda recuperarse en óptimas condiciones.

El propio técnico buscó llevar tranquilidad y despejar rumores sobre su estado: “Dijeron muchas tonterías. El que sabe de su salud es uno mismo. Si yo estoy trabajando, es porque tengo el alta de todo”. Se espera que este jueves reciba el alta médica y pueda regresar a su domicilio.