Gimnasia pisó fuerte en condición de visitante y consiguió un triunfo clave para seguir en carrera en el Torneo Clausura. Con autoridad y solidez defensiva, el equipo de Fernando Zaniratto superó 2-0 a Barracas Central y se metió en semifinales, donde disputará el clásico platense como local.

El partido comenzó con mucha intensidad y rápidamente se instaló la polémica: Jeremías Merlo recibió una fuerte infracción de Nicolás Demartini que el árbitro Hernán Mastrángelo no sancionó con tarjeta, generando reclamos del banco tripero. Minutos más tarde, a los 17, llegó la apertura del marcador. Tras una combinación por derecha, Merlo asistió a Manuel Panaro, que definió ante la salida del arquero. La jugada fue revisada extensamente en el VAR por una posible posición adelantada, pero finalmente el tanto fue convalidado, convirtiéndose en el tercer gol consecutivo del delantero.

El Lobo cerró una primera etapa ordenada y con control del ritmo. Ya en el complemento, Barracas Central fue en busca del empate y estuvo cerca con un tiro libre de Rodrigo Insúa que superó la estirada de Nelson Insfrán y pegó en el travesaño.

Zaniratto movió el banco para sostener la intensidad y refrescar el ataque. Entre esos ingresos apareció Franco Torres, quien en tiempo de descuento capitalizó un contraataque, definió con precisión y sentenció el 2-0 definitivo.

Barracas agotó recursos ofensivos sin poder romper la firmeza defensiva albiazul, mientras que Gimnasia administró los tiempos y cerró una clasificación justa, basada en orden táctico, contundencia y carácter en los momentos clave.

Con este resultado, el Lobo se mete entre los cuatro mejores y ahora se viene un duelo decisivo: el clásico platense frente a Estudiantes, con Gimnasia como local, buscando el pase a la final del Torneo Clausura.

La ciudad de La Plata se prepara para un cruce histórico con pasaje a la final en juego. El clásico definirá quién tendrá la chance de pelear por el título.