

Antes de la conferencia de prensa previa al partido entre Portugal y Hungría por la Eurocopa, el delantero de Juventus se sentó ante las cámaras y posó su mirada sobre las dos botellas de Coca Cola que se ubicaban sobre el escritorio a modo de patrocinio.
Luego, Cristiano las agarró y corrió algunos centímetros para ubicarlas fuera del plano televisivo, ubicando en su lugar la botella de agua.
"Agua", expresó modo de justificación y levantando la botella como un trofeo, seguido de un "Coca Cola", en tono despectivo.
El rechazo de Ronaldo a Coca Cola desató consecuencias inmediatas para la firma americana. Según informa el diario Marca el mercado bursátil (bolsa de valores) abrió el lunes a las 15 en Europa. En ese momento la acción de Coca Cola se encontraba en cifras cercanas a los 56.10 dólares.
Media hora más tarde, cuando Cristiano Ronaldo y el entrenador de la selección de Portugal, Fernando Santos, llegaron a la sala de prensa del Puskas Ferenc Stadium de Budapest, las acciones se desplomaron alcanzando un mínimo de 55.22 dólares. Y por medio, el gesto de CR7. Acto seguido se registró una brutal caída del 1,6% para la compañía. Y en términos económicos, Coca Cola pasó de valer 242 mil millones de dólares a 238 mil millones. Unas pérdidas totales de 4.000 millones de dólares.
¿Pero que es lo que en realidad pasó?
El lunes la empresa pagó sus dividendos trimestrales. ¿Qué significa esto? Que cada tres meses reparte algo de sus ganancias entre sus accionistas. Las cotizaciones descuentan el dividendo, teóricamente, el día que se paga. Esto se debe a que Coca Cola ahora vale menos por haber producido un desembolso de dinero que deja de estar en su caja.
Coca Cola es una de las marcas más sólidas de Wall Street. Es denominada como empresa bono, lo que significa que, suba o baje la acción, el inversionista siempre va a cobrar un respetable porcentaje anual. Por ende, es raro que Coca Cola tenga grandes fluctuaciones en su cotización, de hecho en la pandemia subió su cotización de 37 a 55 dólares.