Por: Flavia Delmas

Desde el Ministerio de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual de la Provincia de Buenos Aires, este año hemos abordado en el primer trimestre 1244 situaciones de alto riesgo, cabe consignar que en la Dirección Provincial de Situaciones de Alto Riesgo y Casos Críticos se registraron 2755 durante el año 2020.

Se trata de aquellos casos en los que siempre hay daño y a veces ese daño se torna irreparable. Son violencias que se ejercen en el ámbito doméstico y violencias que se presentan en el contexto de delitos complejos.   

Las violencias por razones de género son múltiples y se encuentran muy extendidas en nuestra sociedad, podemos reconocer diferentes formas: simbólica, sexual, psicológica, física, económica, patrimonial, institucional, laboral, ambiental, mediática, digital, obstétrica, política. Violencias que permean todos los ámbitos donde se desarrolla la vida cotidiana.

Esas violencias que implican violaciones a los derechos humanos son producidas por varones, como expresa el Doctor Néstor Artiñano, se trata de masculinidades trágicas. Afectan a mujeres, lesbianas, travestis, trans, intersexuales, gays, entre otras diversidades sexuales, también a niñas y niños. Tiene alcances expansivos llegando a conmocionar a comunidades enteras, constituyen un obstáculo para el desarrollo con justicia social y equidad.

El Sistema Integrado de Políticas Públicas (decreto 997/20) nos señala que debemos trabajar de manera transversal, integral, intersectorial, interministerial y en varias oportunidades también interjurisdiccionalmente como sucedió en los traslados realizados durante el 2020 en plena pandemia, entre municipios, a otras provincias y a otros países, de 173 mujeres y 285 niños, niñas y adolescentes.

Para abordar las situaciones de alto riesgo en 2021, se ha trabajo en articulación con 98 municipios de la provincia. Esta problemática, por sus características, debe ser resuelta en el territorio, con los recursos institucionales y sociales con los que cuenta cada lugar, es por ello que las Mesas Locales son de total centralidad para definir las estrategias, para poner en común lo que cada actor/a de la comunidad aporta y la manera en que deben actuar en conjunto y cotidianamente, teniendo en cuenta desde la prevención hasta la salida de las violencias.   

Son 10 los municipios que representan el 51 % de los casos abordados en enero, febrero y marzo de este año, La Plata es el municipio desde donde más derivaciones se produjeron, seguida por La Matanza, General Pueyrredón, Merlo, Lanús, Almirante Brown, Florencio Varela, Avellaneda, Malvinas Argentinas y Quilmes.

En el mismo período se asistió en 30 femicidios, 54 desapariciones – 53 personas fueron encontradas - y 13 casos de trata y explotación sexual. 

Desde el inicio de la gestión, en diciembre de 2019 a marzo de 2021 se quintuplicó la colocación de dispositivos duales, comúnmente conocidos como tobilleras. La Plata fue el municipio donde más se colocaron seguido por Pilar, San Vicente, Ituzaingó y Hurlingham.

Es preciso destacar que el 3 de Junio pasado hemos presentado el Registro Único de Casos de Violencia de Género, cuya ley de creación es de 2014 pero que nunca, hasta ahora, había sido diseñado y puesto en marcha. En su primera etapa será implementado en municipios y nos permitirá conocer en mayor profundidad la problemática, además de impactar sobre la calidad de la atención, ya que a través del mismo se pueden historizar las situaciones, contextualizarlas, y conocer las intervenciones que se producen en cada área reduciendo la revictimización.

Otro dato importante lo constituye el programa Comunidades sin Violencias que se ha presentado en 120 municipios y que en los próximos días se llegará al total de la provincia. Este programa prevé la presentación de proyectos a ser financiados en 3 líneas: a) la de formación de equipos interdisciplinarios, b) el equipamiento y funcionalización de dispositivos territoriales de protección y c) la formación en oficios y el apoyo a grupos asociativos para el acceso al trabajo. 

Además, es importante resaltar el fortalecimiento de la línea 144 PBA, de atención primaria.

Con la creación del Ministerio, se tomaron una serie de decisiones para mejorar la atención y la condición de las trabajadoras, que antes se encontraban reguladas por un ente privado. Este año se reincorporó a la planta del Estado a las trabajadoras de la línea 144 de asistencia a mujeres y LGBTI+ en situaciones de violencia por razones de género, que constituyó un avance en materia de derechos laborales y de política pública para mejorar esta herramienta.

Como primera medida y en base a políticas de cuidado, la Línea pasó a tener una supervisión interna además de una supervisión externa, se puso a disposición un equipo para la escucha de las trabajadoras y se otorgaron los derechos básicos e indispensables requeridos en este ámbito, como por ejemplo las jornadas de descanso adecuadas para quienes realizan la tarea de escucha.

También, durante la pandemia, se incorporó personal, se realizaron protocolos de atención presencial ya que la línea fue declarada servicio esencial por el Gobierno de la Provincia. A partir de 2021 se sumaron vías de atención. La comunicación también se establece mediante las redes sociales WhatsApp y Telegram.