

Diana de Gales, también conocida como Lady Di, madre de los príncipes William y Harry, definitivamente vivió una vida inusual. Además de haberse ganado el corazón de toda Inglaterra y parte del mundo, tenía una personalidad única, llena de secretos, así como aspiraciones que la alejaban de la vida aristocrática. Demostró tener sentido del humor y pasión por sus sueños
Diana era un icono adelantado a sus tiempos y dejaba con la boca abierta en sus apariciones en público por lo que muchos la consideran la primera 'it girl'. Ya lo dijo Giorgio Armani, «sin lugar a dudas, Diana fue el más poderoso de los iconos de la moda y el estilo de su tiempo».
Para el 9 de noviembre de 1985 los príncipes de Gales realizaron una visita oficial a Estados Unidos. Tuvieron un encuentro con Ronald y Nancy Reagan, pero sin duda el momento icónico fue cuando Lady Diana bailó con John Travolta.
Diana de Gales en el estreno de la película 'Shirley Valentine'. Dcha: Vestido expuesto en 'Diana: Her Fashion Story'.
Una de las parejas más icónica de Hollywood durante los 90, Nicole Kidman y Tom Cruise. La actriz llevó durante el encuentro un vestido blanco sin mangas y guantes a juego hasta los codos, mientras Tom Cruise decantó en un esmoquin clásico. Este encuentro fue durante el estreno de ‘Far and Away’ en 1992.
Era una experta en colorimetría. Por otro lado, inventó el athleisure. Salir a la calle en prendas deportivas en plena década de los 90’s. Lady Di lo hizo, reinventó los sneakers hasta hoy. Además, mezcló prints antes que nadie, combinando más de un estampado en un mismo look. Hasta llegó a usar un collar con diamantes como corona. También experimentó con las siluetas. Un día la podías ver con una silueta bodycon y al siguiente con una extra oversized. Y jugó con las texturas, ¿Lana+seda? ¿Terciopelo+encaje? Diana de Gales dijo ‘sí’ a todas las posibilidades.
Diana y su collar-tiara
De hecho, un dato curioso es que eligió su anillo de casamiento de un catálogo, ni más ni menos que la princesa. Aunque este tipo de joyas tan significativas tienden a hacerse a la medida, Diana de Gales seleccionó su anillo en un catálogo de la colección de joyas de Garrard. Era un zafiro ceilán montado en en una banda de oro blanco rodeado de 14 diamantes en solitario, que su valor ascendía a los 60 mil dólares. Fue el mismo anillo con el que el príncipe William le pidió matrimonio a su esposa, Kate Middleton.
La casa italiana Gucci lanzó una nueva colección de bolsos retro, inspirados en sus diseños de 1991. Alessandro Michele, el director creativo de la firma, bautizó el diseño bajo el nombre “Gucci Diana”, ya que era uno de los favoritos de Diana de Gales, y representa la noción de estilo en constante evolución. La firma decidió relanzar el bolso de mano con asa de bambú, con el que Lady Di fue fotografiada en distintos momentos de su vida: desde compras en Bond Street, visitas al gimnasio, hasta sus visitas a la Escuela Ludgrove, donde estudiaba el príncipe Harry. Al diseño original, se le agregaron cinturones de cuero de neón extraíbles, un guiño a las bandas funcionales que alguna vez vinieron con el original para mantener la forma de las asas.
Hay una prenda por excelencia que la caracterizaba, eran los vestidos camiseros: largos y cortos, anchos y ajustados, estampados o lisos. prenda todoterreno era utilizada por Lady Di en numerosos actos y tiene muchos y distintos modelos, como el que eligió en su primer viaje oficial al extranjero en marzo de 1983, dos años después de su casamiento.
Este, eligió para visitar la ciudad de Woombye, en la región de Queensland. Un vestido amarillo y blanco de seda con estampado floral. Su diseñador fue Jan Van Velden. Lo combina con un cinturón y unos zapatos de color blanco. Sencillo pero elegante para cualquier encuentro informal.
En realidad, quería ser bailarina. Diana de Gales tomó clases de ballet, sin embargo, su altura le impidió destacarse en esta disciplina. Para ella, este arte era un escape de la realidad, según se retrató en el documental The Story of Diana, ella recurría al ballet para olvidarse de todo. Aunque era demasiado alta para convertirse en una profesional, esto no impidió que siempre estuviera relacionada con esta expresión artística y apoyó a la Compañía Nacional de Danza de Inglaterra hasta el día de su muerte.
La venganza
Con un vestido negro largo, al cuerpo y escotado, regalo de su amigo, el diseñador marroquí Jacques Azagury, que recuerda a aquel “de la venganza” que había usado tres años antes, el día que Carlos admitió por televisión su infidelidad con Camilla ParkerBowles en un intento por contar su versión de la historia y ganar algo de simpatía frente a la arrolladora popularidad de la madre de sus hijos. Diana en aquella época ya venía fantaseando con la idea de retirarse para siempre de la escena pública.
Argentina
Y, en noviembre de 1995, una de sus frases más célebres, pronunciada ante 23 millones de británicos en una entrevista con la BBC. Justo despúes del reportaje, el momento que eligió para realizar su gira por la Argentina fue bastante particular, ya que sucedió días después de la emblemática entrevista en la que reveló las infidelidades del príncipe Carlos entre otros problemas.
Según recordó hace algunos años atrás el excanciller, Jorge Faurie, que en ese entonces era director de Ceremonial de la Cancillería, cada vez que podía, Diana pedía un teléfono para hablar con Harry y William.
Sobre el Río Luján llamado Isla Silvia, donde se alojaban unos cien chicos con problemas penales y de adicciones en Argentina.
Más de dos millones de personas acompañaron en las calles de Londres el paso del carruaje con sus restos durante el funeral de Estado el 6 de septiembre de 1997. En un accidente de tránsito, llaman al profesor Alain Pavie, quizás el mejor cirujano cardíaco de Francia. Pavie decide que Diana debe ser trasladada a uno de los quirófanos. Tenía una hemorragia interna. En el procedimiento encontró la herida más grave: un desgarro en la vena pulmonar superior izquierda, en el punto de contacto con el corazón. Pavie sutura la lesión. Pero luego de varios intentos su corazón no resistió más y se apagó.
Quizás, Diana Spencer se fue tomada de la mano del hombre que amó, junto a sus hijos, mirando las aguas del Mediterráneo. Soñando con una nueva vida.
Lady Di, último día con vida