

Por: Magdalena Ferreira
La historia de esta fecha en especial, comienza hace 114 años con un reclamo que aún sigue vigente en el movimiento femista: igual paga y condiciones de trabajo que nuestros compañeros varones.
El 8 de Marzo de 1908, un gran grupo de 129 mujeres iniciaron una huelga con permanencia en su lugar de trabajo en la fábrica Cotton de Estados Unidos, reclamando igual paga por las mismas tareas y una jornada laboral de menos de 10 horas. Ante esta situación, el dueño de la fábrica ordenó cerrar las puertas del edificio para poder disolver la protesta, esperando que las mujeres desistan sobre su reclamo, pero todo terminó en un incendio que causó la muerte de todas las trabajadoras.
Luego de aquella tragedia, en 1910 se proclamó la segunda Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas, donde oficializaron que cada 8 de marzo se conmemora el “Día Internacional de la Mujer Trabajadora”, en homenaje a las 129 obreras. 67 años después, en 1977 la ONU también reconoció y oficializó esta fecha.
En nuestra región, tenemos una larga historia de la lucha de las mujeres y nuestra participación dentro de la política. Desde compañeras guerrilleras olvidadas por la historia oficial como Juana Azurduy o María Remedios del Valle, quienes lucharon por la independencia de nuestro país. Desde Eva Perón y su decisión política de involucrar a las mujeres en la toma de decisiones sobre los caminos de nuestra patria con el sufragio femenino en 1947 y formando después, el Partido Peronista Femenino; desde las militantes de los años 70 que dejaron la vida luchando por un país más justo; desde las mujeres que en los 90’ y 2000 que pararon la calle para reclamar trabajo y pan, haciendo ollas populares en los barrios y organizándose unidas. Desde los 8 años donde tuvimos a una mujer, Cristina Fernández de Kirchner, conduciendo nuestro país habiendo ganado con el 54% de los votos y conquistando derechos como la Ley de Educación Sexual Integral y la Ley de Matrimonio Igualitario. Hasta el día de hoy, donde nuestro reclamo por el Aborto Legal se logró en 2020 y también se tomó la decisión política de darle un lugar institucional a nuestras luchas, creando el Ministerio de Mujeres, Género y Diversidad, donde se piensan, desarrollan y ejecutan políticas integrales para la plena igualdad jurídica, social, económica, laboral, política y cultural entre los géneros.
Como movimiento nacional, hemos logrado grandes conquistas a lo largo de nuestra historia, pero también sabemos que nuestro sueño por una sociedad justa e igualitaria lleva mucho tiempo, lucha, trabajo y militancia. Este #8M nos volvemos a encontrar en las calles, reclamando por el fin de la violencia machista y denunciando la carga del FMI sobre nuestros hombros; exigiendo que la variable de ajuste no vuelvan a ser las mujeres.
Es así que bajo la consigna “La deuda es con nosotras” marcharemos entendiendo que la mayor desigualdad la vivimos en la economía, con una brecha salarial entre hombres y mujeres que sigue existiendo. La igualdad de derechos sociales y laborales es y fue siempre, nuestro principal eje de reclamo.
*Las trabajadoras de enAgenda hoy paramos y marchamos.*