

Por: Agustín Cámara
Festejen 47 millones de argentinos: somos campeones mundiales. Argentina le ganó por penales a Francia luego de un 3-3 para el sufrimiento. Último mundial de Lionel Messi, y se lleva la copa.
La fortaleza mental de este equipo, de cada uno de estos jugadores, salió a relucir en los penales. El dibu, nuestro superhéroe, atajó un penal a Coman y distrajo a A. Tchouaméni para que lo erre.
Del desarrollo no hay mucho que agregar. Un tiempo suplementario no apto para cardíacos, la pelota que no quiso entrar, el segundo tiempo del suplementario que nos puso por encima de Francia y a los minutos nos volvieron a empatar.
Un partido perfecto tácticamente que la suerte no acompañó, pero que la confianza y la convicción de cada uno de los jugadores, les dió la seguridad para afrontar los penales con garra y corazón.
Festejen argentinos, somos campeones del mundo.