La Plata | 6 jul 2024
Teatro
Gerardo Romano realizó su unipersonal "Un judío común y corriente" en el Teatro Coliseo Podestá
Este viernes 5 de julio el actor Gerardo Romano presentó su obra "Un judío común y corriente" en el Teatro Coliseo Podestá, perteneciente a la Municipalidad de La Plata. La obra está basada en un texto del dramaturgo y cineasta Charles Lewinsky, protagonizada por el prestigioso actor y bajo la dirección de Manuel Gonzalez Gil.
Luego del monólogo teatral, el director del Teatro Coliseo Podestá, Alejo García Pintos y el Asesor General del Municipio, Jorge Lescano, recibieron al actor luego de su obra y le hicieron llegar un saludo del intendente Julio Alak. Es reconocida la pertenencia ideológica al Justicialismo de Romano, quien destacó la tarea que viene realizando el Jefe Comunal en la ciudad y Axel Kicillof en la Provincia de Buenos Aires, además remarcó que "Axel es la esperanza que tiene el peronismo para el futuro".
Gerardo Romano junto a Jorge Lescano, Asesor General de la Municipalidad de La Plata.
Días atrás el actor de "Antín" en El Marginal -entre otros grandes actuaciones-, había manifestado la emoción de presentarse en el Coliseo Podestá por ser "un teatro de 140 años que llevan la memoria honorable de los hermanos Podestá" por lo que manifestó que "es un orgullo subirse a este escenario".
Sinopsis de "Un judío común y corriente"
El actor Gerardo Romano es Un judío común y corriente, obra escrita por Charles Lewinsky en versión en español de Lázaro Droznes, en la que se refleja el conflicto que debe resolver un judío alemán que vive en Alemania cuando recibe la invitación de un profesor de Ciencias Sociales de una escuela secundaria, cuyos alumnos, luego de estudiar el nazismo quieren conocer a un judío.
Es entonces que el protagonista pasa revista a los principales puntos de argumentación por los que considera que no debe aceptar la invitación y de esa manera ilustra a la audiencia sobre la problemática contemporánea de los judíos fuera de Israel y sobre los problemas específicos que plantea para un judío la vida en un país cuya población vive bajo el peso psicológico de las consecuencias del nazismo.
No exenta de humor y a la vez de poseedora un gran peso dramático y una carga emotiva acorde al tema, Un judío común y corriente es el vehículo exacto para que Gerardo Romano vuelva a utilizar el formato de monólogo teatral y bajo la dirección de Manuel González Gil logren capturar el interés del público a lo largo de los 80 minutos de duración del espectáculo.