En la misma línea del recorte al gasto público, el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, retomó la cuestión de la obra pública y la decisión conciente de abandonarla a largo plazo.

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Junto a empresarios convocados por Fundación Mediterránea, aseguró que "la obra pública no vuelve más" y apuntó contra un presunto grupo de funcionarios que llevaban a cabo obras por los municipios y las provincias: "Las iban vendiendo, y así, la obra pública era un mecanismo de corrupción y sometimiento político. Hacía falta decisión para eliminar todo eso de un saque".

"Se está hablando de recomenzar obras que ya están por ser terminadas. En definitiva, no hay ninguna novedad. Hay muchas obras, no tengo estadísticas exactas, pero hay obras que están en el 80%, hay obras que están en el 95%, 98% y le faltan dos o tres meses para ser terminadas. Está frenada la obra pública, excepto alguna excepción", sumó Sturzenegger.

Hace tan sólo unos días, el Consejo Federal de Inversiones (CFI) contó con la participación del gobernador de Chubut, Ignacio Torres, de Entre Ríos, Rogelio Frigerio (PRO) y de Santiago del Estero, Gerardo Zamora (UxP), quienes reclamaron al Gobierno de la Nación que "apueste por la infraestructura".

"Se cree que el privado va a venir a hacer algunas obras y eso no es verdad", señaló el mandatario chubutense y sumó: "Quiero un país industrial que agregue valor y verdaderamente federal. Necesitamos que se mantengan cada ruta de la Argentina como se mantiene la General Paz".