Por: Federico Rosen

El conjunto dirigido por Miguel Ángel Russo salió  a la cancha con la esperanza de avanzar a los octavos de final. Para lograrlo, necesitaba tener una diferencia de al menos seis goles y confiar en que el Bayern Múnich le gane al Benfica.

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Durante la primera mitad, Boca arrinconó a su rival con la intención de abrir rápidamente el marcador. Sin embargo, el conjunto neozelandés ofreció una sólida resistencia y logró mantener el arco en cero durante 25 minutos. Un minuto más tarde, llegó la apertura: Di Lollo ganó de cabeza en el área, el balón dio en el palo, rebotó en el arquero Nathan Garrow y terminó entrando. Exequiel Zeballos salió lesionado. 

Ya en el complemento el Auckland City se encontró con el empate del partido a los 52 minutos gracias a un cabezazo de Christian Gray. El dato curioso es que el autor del gol, es que trabaja como docente en una escuela de su país y debió pedir licencia para poder participar del Mundial de Clubes. Más adelante, el encuentro fue interrumpido por tormentas eléctricas que afectaron la ciudad de Nashville. Luego de que se reanudó el encuentro se mantuvo el empate.

Boca se despidió del Mundial de Clubes con apenas 2 puntos sobre 9 en juego. Igualó 2-2 en el debut, cayó 2-1 frente al Bayern Múnich en la segunda fecha y cerró su participación con un empate 1-1 ante el único equipo amateur del torneo. En total, convirtió 4 goles y recibió 5.

Por otra parte, Benfica sorprendió al vencer al Bayern Múnich y se aseguró el primer puesto del grupo. El conjunto alemán, a pesar de la derrota, logró avanzar como segundo.