Por: Agustín Cámara

El partido entre Argentina y México comenzó muy parejo empatando en 0 en el primer tiempo. Con pocas situaciones de gol del equipo argentino, los mexicanos tuvieron más ocasiones pero el Dibu Martínez estuvo sólido bajo los tres palos.

Comenzó con los jugadores de ambos seleccionados un tanto nerviosos y con muchas imprecisiones. Por el lado argentino, De Paul tuvo una mala primera mitad perdiendo muchas pelotas simples en el mediocampo. Messi, por su parte, estuvo activo siendo partícipe de todas las jugadas de la albiceleste.

El segundo tiempo Argentina hizo el click que el equipo necesitaba, dominó el encuentro desde el primer momento pero le costaba concretar las jugadas. Hasta que Lionel Messi apareció a los 64' con un golazo desde la puerta del área que Ochoa no pudo contener, y abrió el marcador para el seleccionado. 

Scaloni rápidamente mandó a la cancha a Enzo Fernández por Guido Rodríguez, y rápidamente el ex River le dio el dinamismo al mediocampo que el equipo necesitaba. De Paul mejoró su rendimiento y Argentina entró en un juego más agresivo que impedía a México dominar la pelota.

Dos modificaciones más fueron necesarias para que se consolide lo que el equipo buscaba: Molina por Montiel y Julián Álvarez por Lautaro Martínez.

La selección seguía intentando sin suerte hasta que a los 87' Enzo Fernández la domina dentro del área, y con un amague se perfila para la derecha y la deposita en el ángulo del arco mexicano para sentenciar el 2 a 0.

El abrazo de los jugadores, las lágrimas de Scaloni y la sonrisa de la hinchada demostraron que fue un partido sufrido. Una vez más el mejor jugador del mundo, Lionel Messi, fue crucial para garantizar el triunfo de Argentina.

El miércoles enfrentará a Polonia desde las 16hs por la clasificación a los octavos de final.

Recordemos que más temprano empató Polonia con Arabia Saudita y ambos equipos, junto a Argentina están con 3 puntos en este Grupo C.