La Municipalidad de La Plata puso en marcha una obra estratégica en 526 y 21, donde funcionaba el Polo de Seguridad, que será reconvertido en el Predio Logístico Municipal. Allí se implementará el Programa Municipal de Compactación (PROMUCO) para dar destino final a miles de autos y motos abandonados, quemados o secuestrados en la vía pública.
A partir de julio, el predio será el punto central donde se completará el proceso legal que exige identificar los vehículos con una oblea, notificar a sus titulares y, en caso de no ser retirados, proceder al acarreo. Aquellos que estén completamente incendiados serán compactados sin necesidad de trámite previo por tratarse de chatarra.
Además, el nuevo espacio también oficiará como centro logístico para todas las áreas municipales, lo que permitirá resguardar maquinarias, móviles, herramientas y demás recursos que actualmente se almacenan en galpones alquilados. Esto representará un importante ahorro para las arcas comunales al centralizar el almacenamiento y suspender múltiples contratos de alquiler.
El predio, que hasta ahora estaba totalmente descuidado y en estado de abandono, con basura, cubiertas, escombros y patrulleros fuera de servicio entre grandes pastizales, comenzó a ser intervenido por la gestión del intendente Julio Alak con tareas de limpieza, despeje y puesta en valor.
Entre las obras realizadas se destaca la nivelación del terreno con el aporte de 12.000 metros cúbicos de tosca, compactados por capas para consolidar un gran playón operativo. Allí se instalará la máquina compactadora y se organizará un circuito de ingreso y egreso de camiones que trasladen los vehículos desde y hacia el predio. El resto del espacio será totalmente parquizado.
Esta iniciativa complementa el Plan de Remoción de Vehículos Quemados y Abandonados que se viene ejecutando en todos los barrios de la ciudad, con la intervención de Control Urbano y Convivencia, la Secretaría de Seguridad y el programa Ciudad Limpia.
Con esta transformación, el Municipio busca no solo sanear una zona crítica, sino también mejorar la logística interna, optimizar recursos y continuar con las políticas públicas de ordenamiento del espacio urbano.