El juez Jorge Gorini resolvió este martes que Cristina Fernández de Kirchner cumpla su condena con prisión domiciliaria en su departamento del barrio porteño de Constitución, y estableció una serie de condiciones estrictas que incluyen el uso de tobillera electrónica, un listado cerrado de personas autorizadas a ingresar al domicilio y limitaciones de movimiento. La medida deja sin efecto la citación judicial a Comodoro Py, en un intento por evitar la movilización prevista para este miércoles.
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Según la resolución judicial a la que accedió la prensa, la exmandataria deberá permanecer en su domicilio de San José al 1111, salvo en situaciones excepcionales de fuerza mayor que cuenten con autorización previa del tribunal. De incumplir alguna de las condiciones fijadas, podría ser trasladada a una cárcel común.
Entre las reglas de conducta dispuestas por el juez Gorini, se destacan las siguientes:
Prohibición de alterar la tranquilidad del barrio: Cristina Kirchner deberá abstenerse de adoptar comportamientos que perturben la convivencia del vecindario, como asomarse al balcón, donde desde hace días acampan militantes en apoyo.
Listado obligatorio de visitas autorizadas: En un plazo de 48 horas hábiles, deberá presentar una nómina con las personas que integran su grupo familiar, custodia policial, profesionales médicos y abogados. Sólo esas personas podrán ingresar al domicilio sin autorización judicial previa.
Restricción de acceso a terceros: Cualquier otra persona que quiera ingresar a la vivienda deberá estar previamente autorizada por el tribunal, tras un pedido debidamente motivado.
Colocación de tobillera electrónica: La Dirección de Asistencia a Personas Bajo Vigilancia Electrónica, dependiente del Ministerio de Seguridad, será la encargada de instalar el dispositivo.
Supervisión trimestral: La Dirección de Control y Asistencia de Ejecución Penal deberá presentar informes cada tres meses para evaluar el cumplimiento de la prisión domiciliaria.
Con esta decisión, el juez dejó sin efecto la citación a Comodoro Py que figuraba en la condena, aunque los abogados de Cristina Kirchner deberán continuar con los trámites legales derivados del fallo.
La resolución llega un día después de que los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola se opusieran al otorgamiento de la domiciliaria, y marca un punto clave en el cumplimiento de la sentencia a seis años de prisión por administración fraudulenta en la causa Vialidad.