El pasado 24 de junio, en una jornada que une simbólicamente a dos gigantes del deporte argentino, la Fundación Fangio homenajeó a Lionel Messi con una réplica del legendario casco que utilizó Juan Manuel Fangio, quíntuple campeón mundial de Fórmula 1.
La entrega fue posible gracias a la gestión del abogado y especialista en derecho deportivo Bernardo Loustalot, quien recientemente presentó el libro de Oscar Mauricio Franco en el Museo Fangio de Balcarce y ofició de nexo para concretar este emotivo reconocimiento.
El casco, que reproduce con fidelidad el diseño utilizado por Fangio, fue entregado a Messi como símbolo del legado de excelencia, humildad y compromiso que ambos ídolos encarnan. Más allá del éxito deportivo, Fangio y Messi representan una misma identidad argentina, forjada en valores como el esfuerzo silencioso, la constancia y la grandeza.
Desde la Fundación Fangio, destacaron el valor emocional del homenaje:
“La humildad, el esfuerzo y la perseverancia que vimos en nuestro querido Juan Manuel son -y seguirán siendo- los valores que enaltecen la victoria.”
Tanto Fangio como Messi nacieron un 24 de junio -el piloto en 1911, el futbolista en 1987- y construyeron trayectorias que trascienden generaciones. Conquistaron al mundo desde distintos terrenos, pero con una misma actitud ante la vida y el deporte.
Este gesto de la Fundación no solo celebra los logros individuales de Messi, sino que establece un puente entre dos épocas doradas del deporte argentino, reconociendo el hilo invisible que une a quienes llevan la bandera nacional a lo más alto del podio mundial.
Desde la Fundación Fangio también agradecieron especialmente a Loustalot, cuya gestión permitió materializar esta entrega que será, sin dudas, uno de los homenajes más simbólicos recibidos por el capitán de la Selección Argentina.