River confirmó la lesión de Maxi Salas: sufrió un esguince de rodilla y estará tres semanas fuera

River recibió este lunes la confirmación médica sobre la lesión de Maximiliano Salas, quien debió salir reemplazado en el primer tiempo del encuentro frente a San Lorenzo por una molestia en su rodilla izquierda. Los estudios realizados en la Clínica Rossi descartaron una rotura ligamentaria, pero confirmaron un esguince del ligamento lateral interno de la rodilla izquierda.

El parte médico, aún no oficializado por el club, estima un tiempo de recuperación aproximado de tres semanas, lo que marginará al delantero de los próximos compromisos del equipo dirigido por Marcelo Gallardo. Entre ellos, se perdería el partido ante Independiente del próximo sábado 9 de agosto y está en duda para el duelo de ida por los octavos de final de la Copa Libertadores, que será el miércoles 14 de agosto frente a Libertad, en Paraguay.

Aunque el parte es moderadamente alentador –ya que el jugador tiene movilidad y no presenta una lesión de mayor gravedad– los tiempos de recuperación dependerán de cómo evolucione día a día. Si responde favorablemente, existe la posibilidad de que Salas pueda estar disponible para el partido de vuelta, previsto para el 21 de agosto en el estadio Monumental.

Una baja sensible para Gallardo

La lesión de Salas representa un golpe para el esquema ofensivo de River. El correntino de 26 años se había convertido en una pieza clave desde su llegada al club, con buenos rendimientos que lo posicionaron como una de las revelaciones del semestre.

Su salida prematura ante San Lorenzo encendió las alarmas en el cuerpo técnico, que rápidamente optó por el ingreso de Miguel Borja. La preocupación creció al ver al delantero con hielo en la zona afectada, aunque los estudios posteriores brindaron algo de tranquilidad.

De Curuzú Cuatiá al Monumental

Maxi Salas nació en Curuzú Cuatiá, Corrientes, y dio sus primeros pasos futbolísticos en el Club Victoria. A los 13 años ya había debutado en Primera en su ciudad natal. Tras una prueba fallida en Boca, se incorporó a All Boys, donde tuvo su estreno en la B Nacional en 2016.

Desde entonces, su carrera incluyó pasos por Chile y México. Su mejor versión se vio en Necaxa, donde se destacó como goleador. Luego brilló en Palestino, lo que motivó su regreso al fútbol argentino. En 2023, Gustavo Costas lo pidió como refuerzo para Racing y fue parte del equipo campeón de la Sudamericana 2024 y la Recopa 2025. Este año fue transferido a River.