Marcos Rojo no volverá a Estudiantes de La Plata y su futuro inmediato estará en otro grande del fútbol argentino. Luego de rescindir su contrato con Boca Juniors, el defensor acordó su llegada a Racing Club, donde será inscrito para disputar los octavos de final de la Copa Libertadores.
La noticia sorprendió al mundo Pincha, donde su posible regreso había sido tema de conversación en las últimas horas, especialmente tras las declaraciones de Eduardo Domínguez anoche, luego de la victoria ante Independiente Rivadavia:
"Yo ya lo manifesté y lo he comentado: los exjugadores, ya lo dijo Sebastián (Verón), lo dicen constantemente acá, siempre son bien recibidos. Va a depender de ellos. Nosotros estamos bien. Pero si vienen, no los voy a echar. No le voy a decir ‘no, vos no’”, señaló el DT.
Sin embargo, y a pesar de ese guiño, desde Estudiantes nunca lo llamaron. Según trascendió luego del anuncio del pase a Racing, en el club de La Plata consideran que el puesto ya está cubierto y que no es momento de incorporar otro marcador central. El propio Domínguez lo dejó claro en conferencia de prensa:
"Estamos con Santi (Núñez), con Ramiro (Funes Mori), con Facundo (Rodríguez), con Leandro (González Pírez), y le queremos dar el espacio a Valente (Pierani), que constantemente está yendo a las Selecciones juveniles y hay que darle el espacio”.
Además, desde Boca intentaron incluirlo en un trueque: ofrecieron a Rojo más 2.5 millones de dólares por Santiago Ascacíbar, pero la respuesta fue un no rotundo. Con el inicio de los octavos de final de la Libertadores a la vuelta de la esquina, el Ruso es intocable para el Pincha. Desde La Plata interpretaron esto como una falta de voluntad del xeneize de negociarlo seriamente al defensor.
Mientras tanto, en Racing, la historia fue distinta. Gustavo Costas lo llamó directamente y lo convenció. El defensor de 35 años firmó la rescisión con Boca, donde había sido separado del plantel profesional y en pocas horas arregló su llegada a la Academia. El contrato será por productividad hasta diciembre de 2026.
Rojo ocupará uno de los cinco cupos permitidos para modificar la lista de buena fe de la Libertadores. Su presentación oficial se hará en los próximos días, pero ya fue anotado para la serie ante Peñarol, que comenzará el martes 13 en Montevideo.
Paradójicamente, el primer partido de Racing tras su llegada será ante Boca, este sábado a las 16:30 en la Bombonera, por la cuarta fecha del Torneo Clausura. Aunque es poco probable que juegue, su presencia ya genera expectativa. En su espalda no llevará su apellido sino su nombre de pila: “Marcos”, para evitar referencias a Independiente, eterno rival de Racing.
Con altibajos en su paso por Boca, marcado por lesiones, expulsiones en partidos claves y polémicas extrafutbolísticas, Rojo buscará ahora en Avellaneda un nuevo capítulo en su carrera. En Estudiantes, por lo pronto, eligieron mirar hacia adelante: el sueño es la Copa Libertadores, y no hay espacio para nostalgias.