NACIONAL | 23 AGO. 2025

Escándalo del fentanilo contaminado: chats internos revelan cómo se manipulaban controles en Laboratorios Ramallo

El dueño de HLB Pharma declaró este viernes en la causa que investiga la distribución de drogas adulteradas. El juez Kreplak definirá su situación procesal en los próximos diez días.



La Justicia Federal avanza en la investigación por las 96 muertes vinculadas al uso de fentanilo contaminado producido por HLB Pharma Group SA y su elaborador exclusivo, Laboratorios Ramallo S.A.. En las últimas horas, el juez Ernesto Kreplak y la fiscal Laura Roteta incorporaron al expediente explosivos chats internos de empleados, que dejan en evidencia fallas graves en la fabricación, control de calidad y ocultamiento de irregularidades frente a las inspecciones de la ANMAT.

 

“Me parece que no queda otra cosa que mentir”

Los mensajes revelan que los responsables de la planta eran plenamente conscientes de las irregularidades. En un intercambio clave, Javier Tchukran, director de Manufactura de HLB Pharma y director general de Laboratorios Ramallo, sostuvo:

“Me parece que no queda otra cosa que mentir”,
en referencia a cómo responder a la falta de registros exigidos por la ANMAT sobre un lote de propofol.

En otra conversación, la supervisora de Control de Calidad Rocío Garay preguntó a su jefe, Wilson Pons:

“¿Miento en los reportes?”.
A lo que Pons respondió:
“Y me parece que no queda otra cosa que mentir”.

Estos diálogos forman parte de la acusación fiscal que describe un sistema de ocultamiento deliberado, manipulación de planillas y armado retroactivo de documentación para disimular irregularidades en la producción de medicamentos.

 

Manipulación de documentos y ocultamiento de pruebas

En diciembre de 2024, empleados reconocieron haber inventado batch records inexistentes. En un grupo de WhatsApp, la trabajadora Sofía Díaz pidió al equipo que los reportes no fueran tan repetitivos para que parecieran reales. Otra colega, Luciana Matti, contestó:

“Oka, empezamos a poner todas horas reales entonces”,
admitiendo que hasta ese momento los registros eran falsificados.

Los chats también muestran cómo se escondieron reactivos vencidos antes de inspecciones del INAME y ANMAT:

Incluso se blanquearon prácticas insólitas, como pintar pisos y puertas de control horas antes de una inspección sorpresa, para simular condiciones sanitarias adecuadas.

 

Fallas críticas y riesgos sanitarios

Las conversaciones también reflejan problemas de infraestructura que ponían en riesgo directo la calidad de los medicamentos:

En un chat del 26 de diciembre de 2024, apenas ocho días después de la fabricación del lote contaminado, un empleado reconoció:

“Ya todos sabían que esa producción se hizo en el aire con respecto a lo documental. Hay que armar todo de cero”.

 

Los imputados en la mira de la Justicia

La investigación apunta a 17 personas como responsables de la cadena de negligencias. Entre ellos:

La acusación sostiene que entre el 18 y el 20 de diciembre de 2024 se produjeron los lotes 31.202 y 31.244 de fentanilo contaminado con bacterias multirresistentes (klebsiella pneumoniae, klebsiella variicola, ralstonia picketii y ralstonia mannitolilytica). Ese material derivó en 305.960 ampollas distribuidas a hospitales y clínicas de todo el país, con un “peligro concreto para la salud pública” que ocasionó la muerte de al menos 96 personas.

 

El “chat de empleados” como prueba clave

Lejos de ser un rumor, los mensajes son ahora prueba oficial en el expediente judicial. La fiscalía los incorporó para demostrar que los responsables de la producción conocían los riesgos, falsificaban documentos, ocultaban sustancias vencidas y manipulaban resultados.

“La verdad que es lamentable lo de producción, hasta que no pase algo grave, parece que no van a escarmentar”,
advirtió en mayo de 2024 la supervisora Garay.
Lo grave ocurrió: la mayor tragedia sanitaria en la historia de la industria farmacéutica argentina.