En una emotiva entrevista televisiva, Daniela Celis habló por primera vez con tanto detalle sobre el dramático momento que vivió durante la internación de Thiago Medina, papá de sus gemelas Laia y Aimé. La ex participante de Gran Hermano confesó que los médicos le dieron muy pocas chances de vida y que la única fuerza que encontró para sostenerse fue su fe en la Virgen de Luján.
Invitada al programa Almorzando con Juana, Celis recordó cómo fue ese proceso: “Él tenía muy pocas chances de vivir. Tenía todos los órganos afectados. Se accidentó y explotaron todos sus órganos: costillas, pulmón, hígado, riñones, páncreas… todo”.
La mediática reconoció que el hecho de que Thiago siga con vida hoy es, para ella, “un milagro conjunto con la ciencia”.
Daniela contó que durante los días más duros viajaba constantemente a la Basílica de Luján para rezar, aunque el ambiente que percibía allí la impactaba profundamente:“Cada vez que iba, la gente me miraba con pena, como si estuvieran viendo a una viuda. Y yo pensaba: ‘¿Qué estoy negando yo que ellos ya ven?’”.
Aun así, Celis aseguró que nunca perdió la esperanza, incluso cuando el panorama era crítico.
En el cierre de su testimonio, la ex GH dejó una frase que conmovió a todos en el estudio:“En mi cabeza no existía la posibilidad de que él no estuviera conmigo. Él tenía que volver. Yo lo sentía, lo sabía”.
Hoy, con Thiago Medina en recuperación y junto a sus hijas, Daniela Celis comparte su historia como un mensaje de fe, amor y resiliencia.